3 mujeres

Una madre caminaba llevando en cochecito a una bebé ( a juzgar por todo el rosa que la rodeaba) que tendría unos 2 meses, la criatura lloraba desconsoladamente, retorciéndose en su “aséptica camita”, la madre inmutable solo se limitaba a conducir el cochecito y mirar el horizonte; a su lado caminaba una nena pequeña de unos 3 años, cantando aparentemente indiferente al llanto de su hermanita, hasta que se detuvieron para cruzar la calle y la niña pequeña se giró hacia su hermana y le dijo con enojo “¡calla bebé, basta!” y luego sonrió buscando la mirada de su madre, que ni así obtuvo.

Y así iban 3 mujeres unidas en el abuso, la sumisión y la indolencia. Una madre con las entrañas mutiladas incapaz de conmoverse con el dolor de su criatura. Una pequeña niña en busca de amor y aprobación repitiendo el lenguaje del desamparo y el maltrato que tan bien conoce en carne propia y una bebé aprendiendo el abecedario de la carencia y el dolor. He ahí la semilla de la violencia, la raíz de esta sociedad del miedo y la carencia.

Comentarios

  1. Es tan triste y dolorosa esta escena que describis, lamentablemente tan comun tambien... :(

    ResponderEliminar
  2. Que duro lo que cuentas ehh y que habitual es ver a bebes llorando en sus cochecitos y sis papas casi sin inmutarse... Que pena

    ResponderEliminar
  3. Leerte ya es un vicio Viole.... te pido permiso para pegar esto en mi blog. Corto, conciso, tremendamente crudo.
    Te juro que se me saltaron las lágrimas al leerte.
    Gracias Viole por compartir tu visión tan privilegiadamente certera de lo que nos rodea.

    ResponderEliminar
  4. Efectivamente, así se van transmitiendo los patrones de la violencia generación tras generación. Lo peor es que esa escena es demasiado habitual en nuestras calles y parques.

    Muy bien visto y muy bien resumido

    ResponderEliminar
  5. por desgracia es tan real y tan cotidiano... :-( ¡cuánta ignorancia!

    ResponderEliminar
  6. Viole, me estoy poniendo al día...esas escenas, puf, muy comunes eh! al menos por estos lares,Te voy a "fusliar" un post que me va como anillo al dedo. Andamos un poco revueltos en casa pero con muchas ganas de cambiar, para eso hay que llorar mucho...y apenas tenemos tiempo!

    ResponderEliminar
  7. ¡Qué potente! y que tristemente real.
    Yo creo que cada vez hay más conciencia ¿verdad?

    ResponderEliminar
  8. Reina - Mamá en Casa, Mamá de Zambra, Alejandra, Ramón, Dara, Olga bienvenid@!!!!! gracias por sus comentarios, me encanta tenerlos por aqui!!!

    Lau!!! y yo sin poder leerte, estoy muy atrasada :( , llevate lo que quieras. ya sabes que para eso están ;). besos enormes... te extraño

    Patricia!!!! te extrañooo... yo también ando bastante liada... y tomando decisiones,en fin todo un poco caótico... pero... está todo bien? hoy abrí mi correo y me encontré con el e-mail que me enviaste... que casualidad justo ando releyendo a Casilda... un viaje de ida cada vez! gracias!!! y por supuesto llévate lo que necesites!!! ahora me pasó por NIDIA, que ganas de conocerlo! besos enormes

    ResponderEliminar
  9. Terrible escena que por desgracia se ve a todas horas. Y lo más frustrante es que no podemos hacer nada por esas niñas ni por esa madre. Cuánta infelicididad absurda nos creamos en el primer mundo...

    ResponderEliminar
  10. Violeta: que doloroso!!!!! te juro que me hiciste acordar cuando yo salio con mis dos bebes y a veces lloraba lu, me la ponia en la mochila y empujaba el coche doble con Juan (que es un armatoste) y lu lloraba lo mismo...y bueno yo paraba pero habia un momento que debria seguir -entonces les cantaba-...pero yo pensaba la gente me debe mirar y debe hacer cada historia....a veces con mellizos tenes que aceptar el llanto con amor....besos, lucre

    ResponderEliminar
  11. Me ha encantado esta entrada, cruda y sensible a la vez. Ojalá podamos reunir el valor necesario para enfrentarnos y rebelarnos al dolor gratuito e innecesario de escenas como esta. Gracias por compartirlo.

    ResponderEliminar
  12. Cuando veo alguna escena así, me da tanta, tanta pena...

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas más leidas

Dejemos las etiquetas para la ropa

Las madres brujas

El amor no es obsceno!

Pues si! lo disfruto!

Criar para la desobediencia

Me visitó Anónimo

Esta geografía tuya y mía

Violaciones cotidianas

Para quien escribo...

El amargo sabor del sutil maltrato